La Escritura da testimonio de que en los nueve días entre la Ascensión y Pentecostés, los Apóstoles "permanecían unidos y eran asiduos en la oración, junto con algunas mujeres y con María, la Madre de Jesús, y con sus hermanos" (Hech 1,14), en espera de ser "revestidos con el poder de lo alto" (Lc 24,49). De la reflexión orante sobre este acontecimiento salvífico ha nacido el ejercicio de piedad de la novena de Pentecostés, muy difundido en el pueblo cristiano.Novena de Pentecostés
Directorio de piedad popular y liturgia, 155
Oración implorando el Don del Espíritu SantoPentecostés 2014Padre Buenoinfunde en nuestros corazoneslas maravillas que obraste en los comienzos de la predicación evangélica,derramando en este Pentecostés el don del Espíritu Santosobre toda nuestra Arquidiócesis de Buenos Aires.Que su presencia que es fuego entre nosotrosrenueve la alegría de anunciar a Jesús,para que muchos hermanosse encuentren con la persona del Resucitadoy les dé un nuevo horizonte a sus vidas.María que presidiste la oración de los Apóstoles en el Cenáculo,ayúdanos a resplandecer en el testimonio de la comunión,
del servicio, de la fe ardiente y generosa,
de la justicia y el amor a los pobres,
para que la alegría del Evangelio
llegue hasta los confines de la tierra
y ninguna periferia se prive de su luz.- Señor envía tu Espíritu- Y renueva toda la Iglesia en Buenos Aires. Amén.
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